De la misma forma que os hablamos de los pagos obligatorios en el post pasado, hoy os queremos contar unos consejos para poder ahorrar un poco más en la cuota mensual de la comunidad de vecinos. (Aunque para un ahorro notable y garantizado deberíais poneros en contacto con profesionales)

– Anualmente hay que revisar los seguros, cuánto se utilizan y qué es lo más utilizado. Si hay algunos que tienen poca o nula utilidad para los intereses de los propietarios o para el edificio en sí se podrían eliminar

– En invierno se reduce el gasto en calefacción central de dos maneras: Apagándola en ciertos tramos horarios (de 11 a 17h, por ejemplo) o manteniendo una temperatura más baja todo el día

– Si se ha pedido un crédito al banco es preferible amortizarlo lo antes posible para no generar grandes intereses que afecten a la economía de cada propietario

– Estudiar la limpieza del edificio, haciendo rentable los días y horas al máximo posible (un día a la semana intensivo, por ejemplo)

– Investigar qué subvenciones o ayudas oficiales podrían beneficiarnos (y en cuáles cumplimos los requisitos). Así se podrían hacer algunas obras y reformas en la comunidad

– Estar el tanto del impago de las cuotas comunitarias, para que los vecinos que pagan no tengan que asumir la cuota de los morosos

– Analizar las obras o reformas que se van a realizar. No precipitarse, pedir diferentes presupuestos…

Mantenimiento y revisión periódica de los servicios y componentes del edificio (calderas, cuadro eléctrico, ascensor…etc.) para evitar su deterioro. Normalmente el arreglo por falta de mantenimiento es más caro que las revisiones correspondientes

– Buscar detenidamente un administrador. Hay que analizar las propuestas y tarifas. Aconsejamos elegir el que mejores garantías ofrezca.

 

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Fuente: Consumer